1. Por qué miramos a los animales, de John Berger.
Alfaguara.
John Berger revolucionó nuestra manera de ver el
arte, la sociedad y la naturaleza, animándonos a mirar el mundo como si se
tratara de la primera vez. Este libro es una buena muestra de ello: variando en
tono desde la anécdota tierna hasta el ensayo profundo, el ganador del Premio
Booker se pregunta cómo y por qué nos hemos vuelto incapaces de ver realmente a
los animales, a los que hemos convertido en muñecos, juguetes y personajes de
cuentos infantiles. Berger nos ofrece un diagnóstico, pero también una salida:
la solidaridad entre oprimidos, la creación de un lenguaje común y una nueva
mirada emancipadora tanto para el que mira como para el que es mirado.
2. Noche. Sueño. Muerte. Las estrellas, de Joyce Carol
Oates. Alfaguara.
John Earle McLaren, «Whitey», un hombre afable de
sesenta y siete años y que durante un tiempo fue el popular alcalde de Hammond,
presencia un altercado entre la policía y un joven de tez oscura al que han
detenido sin motivo aparente. Tras verse moralmente obligado a intervenir, los
dos agentes se ensañan con él con una fuerza tan inusitada que Whitey muere de
un infarto. Este último acto heroico abre la puerta a una realidad bastante más
oscura en la familia McLaren, cuyos cinco hijos afrontarán el duelo revelando
sus prejuicios, rencores e inseguridades: desde el desdén racista hacia la
nueva pareja de la madre hasta las estrategias sibilinas para hacerse con la
mayor parte de la herencia. Bajo una fachada de respetabilidad se esconden unos
cimientos podridos, que pueden hacer que la casa familiar acabe por
derrumbarse.
3. El último caso de William Parker, de Alexandre
Escrivà. Alfaguara.
Un amanecer, muy cerca de la Navidad de 2018, la
cabeza de la joven Sarah Evans aparece en medio de una calle concurrida de San
Francisco. La ciudad se despierta con horror y la policía encuentra el resto
del cuerpo en casa de la víctima: desnudo, arrodillado y con los brazos
amarrados a las paredes. El inspector William Parker, especialista en asesinos
en serie, lleva un tiempo alejado de sus funciones y retirado del cuerpo tras
un caso particularmente traumático, pero la teniente Watson está convencida de
que solo él puede ayudarla a desentrañar el misterio de esta muerte macabra.
Tras muchas dudas, Parker decide aparcar sus viejos temores y se lanza de lleno
a una investigación que cambiará todo lo que creía saber sobre aquel viejo caso
que inútilmente había intentado olvidar.
Mientras tanto, el experiodista valenciano Fernando
Fons, llegado recientemente a San Francisco tras huir de un trágico
reencuentro, sigue con interés la búsqueda del asesino al que la prensa ha
apodado «el Verdugo». Así, Parker y Fons se embarcarán por separado en una
carrera hacia el peligro, acercándose poco a poco el uno al otro y
aproximándose también a un secreto que muchos intentan proteger a toda costa.
4. No huyas, de Sandrone Dazieri. Alfaguara.
Al regresar del instituto, Amala Cavalcante percibe
que un hombre la está siguiendo y antes de abrir la puerta de su casa se
desvanece. Al despertar, un agudo dolor en el hombro destapa el horror: tiene
atornillado en su propia carne un cable que la une a la pared y le permite
desplazarse por una habitación. A través de un hoyo consigue pasar un mensaje
al exterior, pero al poco tiempo recibe una respuesta: No Huyas.
La tía de Amala, la célebre abogada Francesca
Cavalcante, empieza a sospechar que su sobrina ha sido secuestrada por un
asesino que hace treinta años estranguló a varias adolescentes. Ella misma se
encargó de la defensa del hombre al que se condenó por aquel crimen, y a quien
siempre creyó inocente. En la búsqueda frenética por salvar a Amala se unirá a
Francesca un extravagante turista israelí, Gerry, la pieza clave para sacar a
la luz toda la verdad. Dazieri, un maestro de la intriga adictiva, nos lleva
sin aliento hasta un final de altísimo impacto.
5. Grados de pasión, de Yolanda Díaz de Tuesta.
Ediciones B.
Hace tiempo que Candela asumió que nunca obtendría
el amor de su padre, Bernardo Salazar, el hombre al que más admira y al que más
le gustaría odiar. Ahora solo desea casarse con la persona que ella ya ha
elegido, llenar por fin esa necesidad de afecto y vivir para siempre en Terrosa
mientras disfruta de un futuro que imagina tranquilo y feliz.
Sin embargo, todo se tuerce cuando su padre regresa
de su estancia en Inglaterra de forma precipitada al pueblo y le presenta al
inglés con quien ha acordado su matrimonio. Lord William Caldecourt, décimo
conde de Waldwick, llega a Terrosa con la intención de ponerlo todo patas
arriba. Es un ser despiadado que está dispuesto a terminar con una larga
venganza. O eso se repite a menudo, pues es lo que le juró a su madre y así se
lo reclama el recuerdo de su familia, destruida por Bernardo Salazar.
Pero, para su desdicha, desde que contempló el
hermoso rostro de Candela en un daguerrotipo, vive pensando que quizá esa mujer
que era solo el instrumento para lograr su venganza pueda convertirse en la
persona que le libere de los oscuros designios del destino.
6. La dama de la judería, de Andrea D. Morales.
Ediciones B.
Desde finales del siglo XV, una leyenda impregna las
calles de Sevilla. Cada noche, la bella Susona, hija de un famoso converso de
la judería del barrio Santa Cruz, acude al encuentro de un caballero cristiano
de noble linaje llamado Nuño de Guzmán. Él no debe enamorarse, pues su cometido
es descubrir si los rumores son ciertos: se dice que Susona y su familia
judaízan en secreto.
Sin embargo, bajo el rocío de las flores de azahar,
se convierten en amantes furtivos. Cuando Susona descubre que una conspiración
que se fragua entre las paredes de su hogar podría dañar a su amado, se verá
obligada a escoger: la fidelidad a su pueblo, a su padre y a su familia, o el
amor que le profesa a Nuño de Guzmán. Para salvar a unos deberá condenar a los
otros.
La historia de Susona, llena de amor, traición y
muerte, acabará tornándose en leyenda. Tras La última sultana, Andrea D.
Morales nos traslada a una época de odio, miedo y conspiraciones entre judíos y
cristianos y nos demuestra que hasta en los momentos más oscuros de la
humanidad, puede florecer la pasión.
7. El último verdugo, de Toni Hill. Grijalbo.
Aunque parezca imposible, un asesino en serie está
ajusticiando a sus víctimas con un garrote vil, el mismo instrumento usado por
los verdugos siglos atrás y considerado la máquina de matar más cruel jamás
construida.
¿Por qué recurre a un método tan macabro? ¿Qué
tienen en común los muertos? ¿Por qué elige lugares especiales de Barcelona
para abandonar los cuerpos como si la ciudad fuera una parte importante de su
mensaje?
Cuando la doctora Lena Mayoral, una prestigiosa
criminalista con un pasado turbulento, recibe el encargo urgente de bucear en
la mente del psicópata, no puede imaginar hasta qué punto se complicará la
investigación ni los peligros que a los que tendrá que enfrentarse. Mientras
aumenta el número de cadáveres, y bajo una creciente presión mediática, Lena se
irá obsesionando con un asesino que, cada vez más, parece estar jugando con ella
una partida a vida o muerte.
8. La estrella de ébano, de Francisco Toledo. Grijalbo.
UNA MUJER LUCHADORA Y VALEROSA
Airam siempre consigue lo que se propone. Su
ambición y talento la han convertido en capitana de un gran buque de salvamento
marítimo, pero su primera travesía a bordo del Clara Campoamor se ve marcada
por un funesto hallazgo.
UNA TRAGEDIA EN EL MEDITERRÁNEO
Los cuerpos de cinco jóvenes africanas flotan en el
agua creando una trágica composición en forma de estrella. Tras rescatar los
cadáveres, la capitana no puede dejar de preguntarse por qué murieron y por qué
las encontraron atadas las unas a las otras. ¿Qué relación había entre ellas? ¿Qué las empujó al
mar?
UN VIAJE HACIA LA VERDAD
El fatídico rescate está a punto de desatar un
tsunami en la vida de Airam. La capitana quiere averiguar qué les ocurrió a
esas mujeres, aunque para ello tenga que viajar hasta el corazón de Nigeria.