jueves, 13 de septiembre de 2018

¿Y tú qué clase de madre eres? (Paula Daly)


Título: ¿Y tú qué clase de madre eres?
Autora: Paula Daly
Editorial: Reservoir Books
Año: 2014
Nº de páginas: 311
ISBN: 978-84-39728719


De la autora:


Paula Daly nació en Lancashire.

Antes de publicar su primera y exitosa novela, ¿Y tú qué clase de madre eres? (2014), trabajaba como fisioterapeuta.


Aclamada autora de cinco novelas, actualmente se dedica a la escritura a tiempo completo en el distrito de los Lagos, al norte de Inglaterra.

Traducida a más de quince idiomas, Daly fue nominada para el premio de la Asociación de Escritores de Novela Negra a la mejor obra del año.




Sinopsis:

¿Dónde está la joven Lucinda? Esta es la escalofriante pregunta que planea sobre los habitantes de Troutbeck, un idílico pueblo inglés enclavado en el distrito de los Lagos. 

La historia comienza cuando Lisa Kallisto, madre trabajadora de tres hijos, descubre horrorizada que Lucinda, amiga de su hija adolescente, ha desaparecido estando a su cargo. Lucinda es la hija de Kate, amiga íntima de Lisa y madre modélica, a quien Lisa no puede evitar querer y envidiar a partes iguales. 


Cuando Lucinda desaparece, Lisa decide ayudar en la búsqueda, colaborando con la magnífica agente de policía Joanne Aspinall, que investiga varios casos de desapariciones en la zona.



Opinión:

Cada vez más aficionado al Domestic noir, me recomendaron esta novela que no he podido dejar pasar.

La novela sucede en 4 días, en vísperas de navidad y está formada por 44 capítulos. Está narrada en primera persona excepto algunos pasajes, los que hacen referencia a la investigación  escritos en tercera persona , y en cursiva los que las autora nos pone en la mente del depredador. Nos situamos en en un idílico paraje de Inglaterra.

Nuestra protagonista Lisa Kallisto, es una madre que va al 200%, (como todas las madres del mundo), trabaja en un refugio de adopción de animales y es madre de 3 niños. Pues bien, ante tal estrés, se olvida de que tenía que recoger a Lucinda, la mejor amiga de su hija, que van al mismo colegio, y llevársela a casa a dormir. Y al día siguiente se acuerda que no la ha recogido y la chica ha desaparecido.

Además en la zona ya ha habido un caso de desaparición de una niña de su edad, que fue secuestrada, violada y puesta en libertad, así que la alarma está más que puesta en toda la vecindad.

La encargada de investigar el caso será Joanne Aspinall, y Ron Quigley. Aspinall es una investigadora seria y concienzuda.

El cargo de conciencia de Lisa es tremendo, y nos hace reflexionar sobre nuestro día a día, porque es que vamos tan a tope, que es normal que hayan cosas que se nos puedan olvidar.

Kate, la madre de Lucinda, es a su vez amiga de Lisa, y ha sido siempre la madre perfecta.

Una vez desaparece Lucinda, empiezan las sospechas sobre algunos de los personajes, y empiezan a suceder cosas y a desvelarse secretos que no os podéis perder, y la autora va dando unos giros magníficos.

La novela se devora en un suspiro, como todo buen thriller que se precie, me inquieta mucho, porque el tema de los niños es mi punto débil, pero he seguido leyendo porque vale la pena la resolución del caso.

¿Y tú qué clase de madre eres? es un entretenido thriller doméstico recomendable para los amantes del género.


Valoración:  8/ 10 Notable


7 comentarios:

  1. No tiene mala pinta, si cae en mis manos le daría una oportunidad.
    Besos

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  2. Hola!!
    Me gusta sumergirme en este género ,el domestic noir que he leído me ha gustado y la trama es muy inquietante por lo que seguro que voy a leerlo. Gracias

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  3. Me llama mucho la atención, espero hacerme con él =)

    Besotes

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  4. Aunque veo que te ha gustado, no me termina de convencer. Un abrazo.

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  5. Me la apunto. A mí las novelas en primera persona me suelen enganchar muchísimo y esa acción en cuatro días tiene pinta de convertirla en trepidante.
    Besos

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  6. Pues menuda pinta tiene. Creo que yo también la podría devorar en unas tardes. La anoto. Besos

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  7. No lo conocía y tiene buena pinta, aunque me agobia bastante la idea de la madre perfecta, que no nos podemos equivocar nunca, ni olvidar de nada... qué estrés.

    Un beso

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