Amor en minúscula (Francesc Miralles)

Título: Amor en minúscula

Autor: Francesc Miralles

Editorial: Suma de Letras

Año: 2016

Nº de páginas: 299

ISBN: 978-84-9129-046-9

Del autor:

Francesc Miralles nació en Barcelona el 27 de agosto de 1968, hijo de una modista y de un administrativo ilustrado.

Pese a su mal expediente consiguió ingresar en la facultad de Periodismo de la UAB, carrera que abandonó al cabo de cuatro meses. Aquel mismo año entró a trabajar de camarero en Les Puces del Barri Gotic, una taberna de la calle Montsió donde aprendió a tocar el piano. 

Nuevamente en la Autónoma, el año siguiente inició la carrera de Filología Inglesa, que combinaría con empleos precarios de profesor de idiomas. Tras cinco años de desidia, se estancó en tercer curso de carrera y volvió a abandonar los estudios. 

Atacado desde los 17 años por la fiebre del viajero, decidió dejarlo todo para vagar por el mundo. Un cúmulo de casualidades le llevaron a vivir en Croacia y Eslovenia durante los conflictos bélicos, peripecia que relataría muchos años después en su libro Café Balcanic. 

De regreso a Barcelona, se reenganchó a la vida académica como estudiante de Filología Alemana en la Central. Completada la carrera, hizo un postgrado para editores. Su ingreso en el mundo editorial había empezado ya un año antes, como traductor de alemán e inglés de libros de espiritualidad y terapias alternativas. 

Inmediatamente después fue contratado como editor por un sello de autoayuda. Allí dirigió diversas colecciones, además de escribir todo tipo de obras bajo seudónimo. Fueron trece meses llenos de incidentes que le valieron por la mili que no había hecho, y que reflejaría más adelante en Barcelona blues, su primera novela en castellano.

Tras abandonar la editorial, se prometió no trabajar nunca más dentro de una empresa. Decidió probar suerte con una novela juvenil, Un haiku per a l'Alicia, que obtuvo el premio Gran Angular de 2001/02. Posteriormente ganó el premio Columna Jove con Interrail. Desde entonces se dedica sólo a escribir, además de ejercer de asesor literario para diferentes editoriales y una agencia.

Sinopsis:

Cuando Samuel, un solitario profesor de lingüística, se despierta el día de Año Nuevo, está convencido de que el año que empieza solo le traerá verbos pasivos y no demasiados momentos en cursiva, hasta que un visitante inesperado se cuela en su apartamento de Barcelona y se niega a salir. La aparición de Mishima, un gato callejero, se convierte en el catalizador que hace viajar a Samuel desde la comodidad de sus libros favoritos, sus películas extranjeras y su música clásica hasta lugares en los que nunca ha estado (como la casa de al lado) y a conocer a gente que nunca pensaría haber conocido (un vecino con el que no había intercambiado ni una palabra). Pero aún hay más: el gato lo reencontrará de nuevo con una misteriosa mujer de su pasado, Gabriela, a quien no tenía esperanzas de volver a ver.

Opinión:

Como la esencia más pura, que va en frasco pequeño (como dice la canción de Ismael Serrano), el amor a veces se esconde en los pequeños detalles, y no desvelo ningún secreto (lo pone en subtítulos en la misma portada), al decir que este es el mensaje subliminal que nos manda Francesc Miralles en su novela.

Amor en minúscula, se ha convertido ya en un bestseller internacional, y está entre los más vendidos de EEUU y Alemania, y será traducido a veinte idiomas.

La novela consta de cinco partes, cada una de ella contiene capítulos cortos. Está escrito en primera persona.

El lenguaje narrativo del autor es llano: muy cercano y actual, consiguiendo una novela fácil de leer y amena.

Miralles ha conseguido crear unos personajes que conectan con el lector, es fácil empatizar con el protagonista, Samuel, y además la rareza de los personajes secundarios (Titus y Valdemar), así como la aparición de Mishima (un gato), crea misterio y necesidad de querer saber más de ellos.

Que Samuel sea profesor de filosofía alemana, no es fruto de la casualidad, sino de una conspiración del autor, que lo ha aprovechado para sacar partido de la filosofía, pintura  y grandes escritores germanos, de los que nos da referencia en la novela, tales como Goethe, Herman Hesse, Bukowski, Bertolt Brecht, Kurkov o el pintor David Friedrich. Con estos referentes literarios, es difícil que no salga un buen libro.

Herman Hesse

Pero el mérito de Miralles ha sido conjugar estos referentes, con una historia amena y divertida, y a la vez romántica y sentimental, que es capaz de tocar la fibra del lector.

Como barcelonés, además, he disfrutado mucho que la novela se desarrolle en mi ciudad, pero es que además, plantea unos escenarios y situaciones, en las que me he sentido muy identificado, porque o me parezco mucho al protagonista, o creo que todos los barceloneses hemos comido alguna vez chocolate con "melindros" en la calle Petritxol, hemos ido a buscar música a la calle Tallers, libros a La central del Raval, o incluso hemos estado por los pasillos del Hospital Clínic.

En momentos de la lectura, recordé dos cosas: aquella conocida película "Cadena de Favores", y aquella definición del "Efecto Mariposa" que decía que pequeñas acciones pueden ayudar a provocar grandes cambios.

Recomiendo leer Amor en minúscula, cuando se tenga un día malo o regular ( bueno, si se tiene un día bueno también se puede), pues es de aquellos libros con esencia, que consiguen dar la vuelta al humor del lector y acabar el día con una sonrisa.

Valoración:  8/ 10 Notable