1. Turno noche, de Edgardo Cozarinsky. Tusquets Editores
Mientras Lucía viaja a Buenos Aires atravesando la
vastedad de la geografía argentina, recuerda su infancia en un pueblo de
provincias, su colegio de pago en el que ella era la niña pobre… Un día a Lucía
le picó una araña venenosa. Sus amigas consiguieron llevarla hasta una
curandera que, además de salvarle la vida, le lanzó un terrible sortilegio. Al
cumplir los dieciocho años, Lucía deja el pueblo para marcharse a la gran
ciudad y allí conoce a Pedro, un periodista de tercera que se enamora de ella.
Pero Lucía no tarda mucho en abandonarlo y desaparecer sin dejar rastro.
2. Hijos de febrero, de Alan Parks. Tusquets Editores
Aún no ha amanecido sobre los húmedos tejados de Glasgow cuando la policía recibe una llamada anónima: han asesinado violentamente a un joven en la décimocuarta planta de un edificio en obras. En el pecho, le han grabado a cuchillo la palabra «ADIÓS». Ese truculento asesinato golpea íntimamente a un conocido y poderoso mafioso, Jake Scobie, y, sobre todo, a su caprichosa hija, Elaine. El agente Harry McCoy, que aún no se ha incorporado al trabajo después de la terapia a la que le abocó su anterior caso, tendrá que encargarse de la investigación. No obstante, ése no será el único cadáver de ese frío mes de febrero de 1973 en que la nieve cubre sin piedad las calles de la ciudad. Mientras tanto, el colega ya no tan novato de Harry, Wattie, trata de alcanzar heroicamente el grado de sargento. Y del horizonte emergen otras sombras, más densas que las tormentas que se ciernen sobre Glasgow: las más peligrosas son las que obligarán a nuestro protagonista, McCoy, a regresar a su atormentada adolescencia, transcurrida en orfanatos y casas de acogida.
3. Hegel, de Jacques D’Hondt. Tusquets Editores
Jacques D’Hondt ha escrito en este libro mucho más que la biografía del filósofo alemán Hegel (1770-1831). El lector encontrará en estas páginas la crónica de uno de los momentos más fascinantes de la historia europea (marcado por la crisis del absolutismo, las guerras napoleónicas y las revoluciones burguesas), así como el apasionante relato de la aventura intelectual que se desarrolla en nuestro continente desde el final de la Ilustración y que, tras pasar por el Romanticismo, culmina con el idealismo alemán, cuya figura más destacada es precisamente Georg W. F. Hegel.
4. La furia de la lectura, de Joaquín Rodríguez. Tusquets Editores
¿Para y por qué leemos? Se dirá que para llegar a
ser más sabios, libres o mejores personas. Pero ¿es así realmente? ¿Queda algún
resquicio que nos permita reivindicar la lectura como una característica
singular del género humano, como herramienta de comprensión mutua e instrumento
para afilar nuestro lenguaje y nuestra conciencia crítica? Algunos piensan que
no. Esta obra busca entre los escombros argumentos para el sí, en concreto
entre las ruinas del campo de concentración de Buchenwald, donde hubo una
biblioteca.
5. El juez y su verdugo, de Friedrich Dürrenmatt. Tusquets Editores
Cuando el teniente de policía Schmied aparece muerto en su coche, en una pequeña carretera de montaña muy cerca de Berna, la investigación recae en el comisario Hans Bärlach, quien está a punto de jubilarse y no pasa precisamente por su mejor momento. Con apatía (¿o es tal vez serenidad?) y malhumor (quizá debido a unos agudos dolores de estómago que no presagian nada bueno), pero con tesón, Bärlach empieza a desentrañar el caso con la ayuda de otro agente. Lo cierto es que cuentan con muy pocas pistas. Pronto el juez instructor, Lucius Lutz, viejo conocido del comisario, lo apremia para que capture al asesino.
6. Filosofía ante el desánimo, de José Carlos Ruiz. Destino
La presión por destacar en una sociedad donde «el
infierno de lo igual» se presenta como una fosa de la que nos exhortan a salir.
La necesidad autoimpuesta de las check-list como rituales de obligada ejecución
para alcanzar la felicidad. La «ideología de la personalidad» que se manifiesta
en forma de bulimia emocional, donde acumulamos y acumulamos experiencias para
vomitarlas ipso facto en las redes sociales. La dolorosa brecha, que se agranda
por momentos, entre el yo real y el yo virtual. La tensión de exigirle al
tiempo libre una realización y productividad plenas, bloqueando así la
posibilidad de disfrute…
Todos estos elementos, si no se analizan bajo la lógica del pensamiento crítico, se encargarán de configurar una personalidad abocada a experimentar un desánimo crónico. Y ante esto, pocos fármacos son más eficaces que la filosofía.
7. Lo leo muy negro, de Antonio Lozano. Destino.
¿Por qué nos fascina tanto el crimen, qué dice de
nosotros como individuos y como sociedad? ¿Qué maneras ha buscado el género
negro de representar la faceta más tenebrosa del ser humano, colocando a
nuestra altura un espejo perturbador frente al cual apartamos la vista, pero
que a la vez nos atrae irremediablemente?
Lo leo muy negro es un ensayo sobre ficción, crimen y vida que aborda el género negro desde múltiples ángulos: sus páginas exploran desde aspectos históricos hasta el perfil de autores clásicos y las claves de la obra de algunos de los autores contemporáneos más destacados, sin olvidar cómo dialogan novelas y ensayos negrocriminales con producciones audiovisuales de ayer y de hoy. En última instancia, este libro recurre a la literatura de crímenes para hablar del lado oscuro de todos nosotros.
8. La intimidad de los viajeros, de Josan Hatero. Destino
«Cuando llevaba cuatro meses viviendo en Berlín, a Yago Santos le ofrecieron una gran suma de dinero para que sedujera a una mujer a la que no conocía. El plan consistía en ganarse su confianza, comenzar una relación con ella y, al cabo de cierto tiempo, abandonarla. Romperle el corazón, fueron las palabras exactas del hombre que le ofreció el trato. Yago aceptó sin hacer muchas preguntas. Aceptó por tener algo con lo que ocupar sus días.»
Este es el arranque de la nueva novela de Josan Hatero. En ese territorio en constante cambio que es Berlín, se cruzan tres personajes que buscan dar sentido a sus vidas, tal vez una segunda oportunidad: Yago, Carrington y Matilda. ¿Qué caminos los han llevado hasta ahí? ¿Qué pretenden con ese juego de espejos al que se entregan? Con una narración que alterna pasado y presente, conoceremos la historia de cada uno de ellos, esos momentos que definieron su personalidad. Así, recorremos la Barcelona de Yago, que entiende el sexo como un atajo para conocerse a sí mismo; el Londres de Carrington, que descubre que la vida alimenta la ficción y viceversa; y el Múnich de Matilda, que solo se siente verdaderamente ella cuando interpreta un papel para los extraños que comparten su deseo.
Con un estilo brillante, una creación de personajes inolvidables y una capacidad inaudita para acercar al lector a la intimidad de los cuerpos ajenos, Josan Hatero se erige como uno de los narradores que mejor ha sabido retratar el deseo, el enamoramiento, el desengaño y la pérdida. Esta novela habla de nuestra identidad, de los caminos de la culpa, de la libertad de elegir y del derecho a tener una segunda oportunidad.
9. Tenebra, de Daniel Krauze. Destino
Martín Ferrer y Julio Rangel se encuentran en un momento de sus vidas en el que todo parece adverso: Julio, fiel servidor del senador Luna Braun, espera un ascenso que lo rescate de sus humillantes tareas. Vive en un mundo hostil donde no puede confiar en nadie, y solo tiene un vínculo amoroso con Marina, una actriz en horas bajas. Martín, por su parte, es un abogado que no ha logrado el éxito y culpa de ello a la pérdida de la fortuna familiar en el pasado. Un intento por restablecer algún tipo de equilibrio en su vida, impulsará sus deseos de venganza y reivindicación contra el mismo grupo de políticos para los que Julio trabaja. Las vidas de Julio y Martín se encontrarán en una encrucijada que no solo los confrontará entre sí, sino consigo mismos.
Con una prosa ágil y sólida, en esta novela
discurren en paralelo dos vidas y dos historias familiares sobre un solo
escenario: la selva del poder. ¿Sirve de algo la justicia, el periodismo
honesto, la verdad y el amor en ese mundo de excesos y humillaciones?
10. Literatura, de Daniel Remón. Seix Barral
Una noche, Teo, un niño de tres años, le pide a su
tío Daniel que le cuente un cuento. Pero no cualquier cuento, sino uno que
incluya a un niño llamado Teo, un coche rojo, una bruja buena y una mala, un
monstruo, una maleta y un montón de dinero. Mezclando el Madrid del
confinamiento con elementos propios de los clásicos infantiles, el narrador
invita a su sobrino a un viaje formidable que le llevará hasta Londres, a una
isla perdida en Filipinas y a una aldea despoblada de Aragón. Un rompecabezas
en el que los personajes persiguen sus deseos mientras huyen de un monstruo de
nombre impronunciable.
11. La calle, de Ann Petry. Seix Barral
Nueva York, década de 1940. En una vivienda pobre en
el corazón de Harlem, Lutie Johnson está decidida a construir una nueva vida
para ella y su hijo de ocho años. Tras dejar a un marido infiel, sola y casi
sin dinero, Lutie tiene fe en el sueño americano y está convencida de que sólo
necesita trabajo duro y determinación. Pero en su camino se dará de frente con
una realidad marcada por la violencia hacia las mujeres, la pobreza y el
racismo.
Publicada
originalmente en 1946 y aclamada por los críticos como una obra maestra, La
calle vendió un millón y medio de ejemplares, convirtiendo así a Petry en la
primera autora afroamericana en superar el millón de libros vendidos. Un libro
adictivo que aúna magistralmente elementos de una trama de suspense con temas
sociales aún vigentes, y que traducimos por primera vez al castellano.
«La calle está a medio camino entre las belles lettres y la literatura popular, y Ann Petry puede ser considerada una pionera del thriller literario, género que acabaría popularizando su coetánea Patricia Highsmith», escribe Tayari Jones en el prólogo a esta edición.
12. El abstemio, de Ian McGuire. Seix Barral
Stephen Doyle, un veterano irlandés-estadounidense
de la Guerra Civil, llega a Mánchester con sed de sangre. Se ha unido a los
Fenianos, una sociedad secreta que intenta acabar por todos los medios con el
dominio británico en Irlanda. Tras los pasos de esta sociedad va el jefe de
policía James O’Connor, cuya misión consiste en descubrir y frustrar sus
planes. Esta apasionante novela sobre la guerra clandestina por la
independencia de Irlanda condensa la historia de dos hombres perseguidos por su
pasado e impulsados por la necesidad de justicia y venganza.
13. El fin del amor, de Tamara Tenenbaum. Seix Barral
Nacida y criada en una comunidad judía ortodoxa en el corazón de Buenos Aires, Tamara Tenenbaum aprendió las costumbres afectivas y sexuales del mundo laico como una antropóloga que descubre una civilización desconocida. A partir de sus estudios de filosofía y la militancia feminista, de las conversaciones con amigos y compañeras, de su propia experiencia e incluso de su propio cuerpo, recorre en este libro los desafíos a los que se enfrentan hoy los y las jóvenes en el inicio de su vida como adultos.
El fin del amor explora qué sucede cuando el
matrimonio o la pareja monógama ya no son un objetivo vital, como lo fue para
nuestros padres y abuelos. Desde el valor de la amistad hasta la cultura del
consentimiento, pasando por la maternidad, la soltería, el poliamor, las
parejas abiertas y el funcionamiento de las tecnologías del deseo como Tinder,
Tenenbaum se zambulle en el universo de los afectos para celebrar el fin del
amor romántico y proponer que, de sus cenizas, salga un amor mejor, que haga
más libres a hombres y mujeres.
14. Azaña. Los que le llamábamos don Manuel, de Josefina Carabias. Seix Barral
Huyendo de todo lo que se espera de una biografía de
un político al uso, Josefina Carabias nos dejó un libro que es mucho más que
una semblanza de un hombre de ideas que tropezó con la amarga realidad de
España. Es también una crónica vívida del Madrid de una época irrepetible, el
de las tertulias en cafés y el voto femenino, por el que se pasean personajes
como Unamuno y Valle-Inclán. Y es, sobre todo, una reivindicación de Carabias
como pionera del periodismo español, un ejercicio literario vibrante que no
renuncia a la veracidad, a la altura de nombres como Chaves Nogales.
Lo leo muy negro tiene pintaza ^^
ResponderEliminarGracias por la información, me he propuesto no apuntar mas de cinco y me está costando una barbaridad, jeje. Besos
ResponderEliminarDe éstos no me llama ninguno...
ResponderEliminarPues hay varios que me tientan. Gracias por la info.
ResponderEliminarBesotes!!!
El único título que me atrae de esta batería de novedades es La calle, de Ann Petry. Gracias por la información. Un abrazo.
ResponderEliminarImpresionante el número de buenas lecturas que traes a tu blog, amigo. Tomo nota de unos cuantos. Gracias
ResponderEliminarSaludos
¡Hola! Me llaman la atención los dos primeros de Tusquets, no descarto darles una oportunidad más adelante. Gracias por la información <3
ResponderEliminar¡Nos leemos!
Gracias por la info no tenía ni idea de ninguna de ellas este mes estoy algo perdida
ResponderEliminarNo he visto info de ninguno, así que, agradecida quedo. Besos
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